A continuación hay un resumen de lo que hemos tratado en este capítulo en cuanto a la apostasía y el espiritismo que han entrado a la Iglesia ASD.

• El panteísmo y panenteísmo.
• La acreditación de las escuelas.
• La Nueva Teología.
• Los cultos irreverentes, que incluyen:
  
  
  • Iluminado dramático, tambores, música rock y rap, música evangélica contemporánea, música de alabanza moderna, jazz, música country y la ópera
  • Los dramas y los mimos
  • El baile litúrgico
  • Alzamiento de las manos y los aplausos
  • Servicios informales de Santa Cena que tratan de imitar la Eucaristía
  • La vestimenta no apropiada
  • Los sermones y bautismos irreverentes
• Los ministerios que usan payasos, pintura de la cara, títeres, etc.
• Apresurar los bautismos.
• Los tipos de hipnotismo.
• La práctica de ideas místicas y de la Nueva Era, tales como la meditación y la oración contemplativa.
• Las caminatas de oración, los guerreros de la oración, las estaciones de la oración, los laberintos de oración y otros tipos de oración que no son bíblicos.
• Las relaciones ecuménicas y entre otras religiones, incluyendo el enfoque sobre el movimiento ecológico y la política.
• El amor al dinero, la popularidad, el poder y éxito mundanos, el entretenimiento, las comedias, los deportes y la competencia.
• El uso de humor poco apropiado.
• Una creencia falsa en cuanto a la Trinidad, tal como la no existencia del Espíritu Santo como una Persona separada.
• La creencia de que Dios no mata ni destruye.
• La creencia de que a Dios no se lo puede llamar por ese nombre.
• El uso de expresiones de jerga para el nombre de Dios.
• No poseer los frutos del Espíritu y no oír su voz.
• Ser hipócrita y estar lleno de orgullo.
• La lectura de libros de una “nueva orden”, incluyendo revistas, sitios web, etc.
• El uso de versiones bíblicas no confiables.
• Aplicar e interpretar mal la Palabra de Dios.
• No estar pendiente del regreso inminente de Cristo.
• Quebrantar los Diez Mandamientos, tal como no guardar el sábado.
• Adorar los dioses de este mundo, incluyendo los artistas tipo Hollywood.
• Tener “ídolos acariciados”.
• Llamar a lo bueno malo, y a lo malo, bueno.
• Guardar las tradiciones, fiestas y sábados lunares de los judíos.
• Añadir las opiniones del hombre a la Palabra de Dios.
• Fijar fechas para la segunda venida de Cristo.
• Rechazar a Elena de White como mensajera de Dios, y hacer caso omiso de sus escritos.
• Rechazar otros profetas y mensajeros de Dios.
• Transigir las normas.
• Discutir detalles finitos.
• El código bíblico.
• Estudiar y practicar ritos antiguos que no son bíblicos.
• Perder tiempo valioso con el análisis de estudios antiguos de los siete truenos (Jeff Pippenger), etc., que no son importantes para nuestra salvación.
• No cumplir con el mensaje pro salud.
• El mal uso del dinero, el tiempo y los talentos.
• Seguir líderes o compañeros, en vez de estudiar personalmente y seguir a Jesús.
• No advertir a otros en cuanto al pecado.
• Honrar a los hombres; los premios.
• Eliminar de la feligresía a los fieles, en vez de borrar a los que siguen en el pecado.
• Los pastores que no visitan ni oran con los miembros de la iglesia.
• Enfocarse en trivialidades que no son importantes para la salvación.
• Vivir un estilo de vida homosexual.
• La familiaridad con el sexo opuesto fuera del matrimonio.
• El divorcio por motivos no bíblicos.
• Llamar a la Iglesia ASD, “Babilonia”.
• Volver a aplicar al futuro eventos pasados de la Biblia, tal como considerar que, después del 1844, un día profético equivale a un año literal.
• Participar de la lluvia tardía falsa.
• Promover o practicar la magia.
• El baile.
• El uso de la psicología y el asesoramiento seculares, estudiar los tipos de personalidades, la filosofía y la teosofía.
• Promover y usar los recursos y programas del mundo.
• La confesión indebida a otros.
• La evolución.
• El “don de lenguas” carismático y la “risa santa”.
• El uso impropio de la imposición de las manos.
• Reuniones de grupos pequeños que siguen prácticas erróneas.
• Saneamientos, milagros y “liberaciones” falsos.
• El amor a las fiestas, festejos, festivales, y celebraciones mundanas, tales como la Cuaresma.
• El enfoque en el arte moderno.
• Las ofertas y ventas especiales.
• El enfoque en el tipo erróneo del servicio comunitario y de la justicia social.
• El menosprecio de las doctrinas para lograr la unidad, etc.
• Creer que no habrán leyes dominicales.

Hasta que la Iglesia ASD se arrepienta de estas cosas, no recibirá la lluvia tardía. Como adventistas, si valoramos nuestra promesa de vivir con Dios por toda la eternidad, es imprescindible que dudemos de las fuentes y los recursos. El hecho que algo venga de una institución ASD no lo hace confiable o seguro para nuestra espiritualidad.